Llevan 31 años de casados, pero pueden transcurrir 20 más
en ese clima de soledad de a dos y rutina, que en un alto porcentaje de las
parejas con muchos años de casados sucede.
Es un film para reflexionar, y darnos cuenta de dónde
empezamos a aceptar todo lo que no queremos y con eso vamos formando un lastre que
en algún momento irrumpe sin dirección.
Sería bueno no
llegar a ese punto, e ir transitando los distintos momentos de la pareja siendo
conscientes de que lo estamos haciendo y que tenemos que tomar decisiones que eviten la separación, tarde o temprano.
En el caso de esta pareja está bastante claro que la
mayoría de los reclamos de ambos han sido por malos entendidos, y no por falta
de amor.
Una lástima.
Recomiendo verla a parejas con muchos menos años de
casados, para tomar las prevenciones necesarias. Y a las parejas con más de 25
aniversarios encima, si pudiera, las obligaría, simplemente porque confío en la
prevención que significa vernos identificados en algunas cosas con la
objetividad para modificarlas a nuestra medida.
Al amor hay que acompañarlo con hechos concretos, sino
se desdibuja, y podemos llegar a creer que desapareció.
Y la guinda del postre: ¡¡Grande Tute!!
Fuente: Diario La Nación
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