De acuerdo a datos publicado por La Nación el 17 /7 la Argentina es uno de los países más envejecidos de América Latina con 13,4% mayores de 60 años.El 84% no trabaja. El 97% vive en lugares particulares y el 81,3% tiene cobertura social.
Este envejecimiento de la población es tan exponencial que mientras esperamos que el Estado provea lo que es su responsabilidad, tendremos que ocuparnos de nosotros mismos.
Urge pensar en la posibilidad de compartir no sólo momentos, sino vivienda con nuestros pares.Muchas veces los hijos han emigrado o nosotros emigramos del lugar de nuestros padres.
Convivir con amigos o con amigas, inclusive el intercambio de colaborar en el cuidado de alguien mayor a cambio de vivienda, es la tendencia que viene.Preparemos nuestra cabeza, porque lamentablemente siempre va un poco detrás de las realidades que tenemos que enfrentar.
2 comentarios:
Estoy totalmente de acuerdo con vos,Elia, muchas personas mayores que son hermanas y cada una vive sola en su casa,con la idea de resguardar su privacidad o libertad, no puede pensar en que estaria bien compartir una vivenda para asi, ayudarse , acompañarse y sostenerse entre si.Cada una en su casa, protesta por que los hijos no pueden acompañarlos y menos atenderlos,pero no resuelven el tema de vivir con alguien porque, o no pueden compartir a causa de que ya hace mucho tiempo que viven solos, o porque no quieren dejar su casa y sus pertenencias.Tampoco aceptan tener una cuidadora, por el mismo motivo, le invade la intimidad, les cambia los horarios y les asalta la desconfianza.
Finalmente muchos de ellos terminan viviendo en una residencia geriatrica.Creo que es bueno planificar la forma de encarar la vejez con mucha anticipación, la sola idea, más la conviccion de que lo resuelto va a estar bien, llegado el momento, hara que no sea tan terrible el desapego y los cambios.
Buen enfoque vivir con persona afin o familiar.
La ventaja que tiene esta opción, es que puede permanecer en el lugar donde nos sentimos arropados y con una persona que se integra al círculo afectivo. Se puede compartir gastos incluso.
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