¿Qué podría hacer a los 97 años?

Vestirse de violeta -que le queda precioso-, ir al casino, tejer crochet -aunque casi no ve-, escuchar radio -aunque oye poco- y recordar… alegrías y tragedias.

Esta mujer excepcional es Elsa Goldschmidt.

Pasó de Reina de Belleza del Danubio en 1933 a tomar un barco rumbo a Sudamérica en el que viajaban 700 personas, pero con capacidad para 350.

Trató de soportar las dificultades de la altura en La Paz - Bolivia, mientras parte de su familia era deportada a campos de exterminio.

Por el dolor de la pérdida de un hijo acompañó a su querida suegra Paula a consultar por depresión a Sigmund Freud.

Sin conocimiento del idioma y sin profesión, su familia decidió refundarse en Buenos Aires y hoy, siendo modelo de vida, vive rodeada de hijos, nietos, bisnietos y amigos como yo que acabo de descubrirla.

¡Un hallazgo!

Continuación...

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